domingo, 10 de julio de 2011

Semanario Nº 215

Los dos caballos
En la calle de mi casa hay un terreno de pastura. Dos caballos viven
allá. De lejos, parecen caballos como los otros caballos, pero cuando
se mira bien, se percibe que uno de ellos es ciego. Aún así, el dueño
no se deshizo de él y le consiguió un amigo: un caballo más joven.
Eso ya es de admirar. Si prestas atención, oirás una campana. Buscando
de dónde viene el sonido, verás que hay una pequeña campana en el
cuello del caballo menor. Así, el caballo ciego sabe dónde está su
compañero y va hasta él. Ambos pasan los días comiendo y al final del
día el caballo ciego sigue al compañero hasta el establo, Y tú
percibes que el caballo con la campana está siempre mirando si el otro
caballo lo acompaña y, algunas veces, se detiene así el otro puede
alcanzarlo.
Y el caballo ciego se guía por el sonido de la campana confiando que
el otro lo está llevando por el camino cierto.

Como el dueño de esos dos caballos, Dios no se deshace de nosotros
solo porque no somos perfectos, o porque tenemos problemas o desafíos.
El cuida de nosotros y hace que otras personas vengan en nuestro
auxilio cuando precisamos.
Algunas veces somos el caballo ciego guiado por sonidos de campanas de
aquellos que Dios coloca en nuestras vidas. Otras veces, somos el
caballo que guía, ayudando a otros a encontrar su camino. Y así son
los buenos amigos. Tú no necesitas verlos, pero ellos están allí. Por
favor, oye mí campana. Yo oiré la tuya.

La gran cosecha: madurez
De la vehemencia y el entusiasmo, deben surgir la paz y la serenidad.
De la ilusión, debe brotar la lucidez. Del optimismo, la esperanza. De
la risa fácil y de la alegría ruidosa, el apacible y agudo sentido del
humor. De la capacidad de asimilación, ha de nacer la riqueza
interior. Del interés abierto a todo, tiene que llegarse a la
experiencia abierta a todo. El ímpetu y el vigor deben producir la
paciencia y la dulzura. La búsqueda inquieta de la felicidad ha de
concluir en el aprecio y la armonía con todo lo que nos rodea. De la
fe en los demás, hemos de llegar a la indulgencia y la comprensión de
todos. De la alegría de vivir, hay que sacar el gozo de haber vivido.
De la necesidad de amar y ser amado, tiene que surgir la derrota de
todos los egoísmos y un amor, al fin, plenamente desprendido. José
Luis Martín D.

Contigo, Jesús…
Querido Jesús, quiero seguirte con sincero corazón sin mezquindad. Ser
de los tuyos, para siempre. Envía tu Espíritu para darme la fortaleza
que necesito para no aflojar, sino para dar más y seguir avanzando
contigo. Que sepa vivir en el amor, sin mediocridad, avivar mi
esperanza, sin conformismos, y dar una mirada de fe, iluminada de
sabiduría, a todas las situaciones cotidianas. Amén.

Personajes con humor
El novelista francés Alejandro Dumas había empleado en una de sus
novelas la expresión “doloroso vacío”. Un crítico, que nada entendía
de novelas y por eso criticaba sin acierto alguno, dijo a Dumas: —
¿Cómo una cosa que es vacía puede doler?
— ¡Cómo! —Le replicó Dumas—, ¿Ud. nunca ha tenido un dolor de cabeza?

En otra oportunidad, hallándose enfermo, Alejandro Dumas fue examinado
minuciosamente por un médico, quien al final le dijo: —Yo le he
prometido decirle toda la verdad. Usted no está bien. ¿Tiene deseos
aún de ver alguna persona?
— Sí, —contestó Dumas—, a otro médico.

Pensamientos
- “Has de saber, hija mía, que mis caudales y tesoros están cercados
de espinas, basta determinarse a soportar las primeras punzadas, para
que todo se trueque en dulzuras”. Jesús a santa Brígida.
- Lo que más necesitamos es una persona que nos obligue a hacer lo que
sabemos. Ralph Waldo Emerson
- Tu vida puede ser la única Biblia que muchos lean. Anónimo
- Lo ideal no es una vida confortable; nuestra entrega a los demás es
lo único por lo que vale la pena vivir. Pasteur.
- Dios no manda cosas imposibles, sino que, al mandar, te enseña a que
hagas cuanto puedes, y a que pidas lo que no puedes. San Agustín.
- Quien quiera algo que no sea Cristo, no sabe lo que quiere; quien
pida algo que no sea Cristo, no sabe lo que pide; quien no trabaje
por Cristo, no sabe lo que hace". San Felipe Neri.
- No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
Walt Whitman.
- Estar contentos con lo que poseemos es la más segura y mejor de las
riquezas. Marco Tulio Cicerón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu visita!!!